Dicen que para gustos los colores.
Esto viene a cuento porque hace ya bastantes meses compré un respaldo Givi muy chulo y de una calidad excelente, pero que tenía una cosa que a mí de daba tres patadas en los higadillos y que encontraba bastante feo, mientras que según me explicó entusiasmado el vendedor eso era lo que a él más le gustaba del respaldo (

). Se trataba del emblema del águila con el logo de Givi que la marca coloca en la parte trasera del respaldo para tapar los tornillos de sujección del pad.

Llevaba mucho tiempo estrujándome el cerebro buscando algo guapo, guapo, para sustituir el águila que no me gustaba nada. No había manera, no encontraba nada que me gustara. Ni en tiendas, ni en puestos de las concentras, nada. Hasta que la noche de la fiesta del 3er aniversario vi la luz...¡¡¡UNA HEBILLA DRAGSTER!!!
Manos a la obra:

Lo primero es quitar el emblema del águila, y estos son los materiales que voy a utilizar para hacerlo:
Lana de acero del 000, un trapo, un palo de polo o de médico (Diga aaaahhh), alcohol de quemar y un trozo de cordel.
El emblema está pegado con adhesivo de doble cara, así que con un cordel fino pero resistente, pasándolo de lado a lado entre el águila y el respaldo consigo que se despegue muy fácilmente...

Como podéis ver, quedan muchos restos, así que con alcohol y el palo de polo (que al ser de madera blanda no rayará el cromado) voy ablandando el adhesivo y retirándolo.
Cuando ya he quitado la mayor parte, uso un trozo de lana de acero del 000 (que tampoco raya el cromado) empapado en alcohol de quemar para acabar de retirar el adhesivo y pulir la zona. Y voilà, el respaldo limpito y reluciente.

Ahora viene la parte más "difícil", aunque la única dificultad que le veo es que hay que ser algo mañoso y tener algunas herramientas como estas:

Una amoladora radial pequeña con un disco de desbastar metal (yo tenía sólo uno de corte y también me sirvió pero mejor el de desbastar) y un sargento (no vale la mujer...

). Recordad que para trabajar con la radial hay que proteger la cara, los ojos y las manos. Es una herramienta MUY peligrosa. Recordad también que cualquier objeto contra el que hagamos trabajar la radial se calentará y mucho.
Y por supuesto el obejto que vamos a trabajar: la HEBILLA DRAGSTER.

Aquí hay dos para que veáis bien el anverso y el reverso, pero sólo utilizaré una.
Para empezar, sujetamos a la mesa firmemente la hebilla con el sargento, dejando visible la punta que hay que rebajar.

Con la radial y mucho cuidado cortamos primero la punta y luego pulimos para que no quede rastro y se nivele con la hebilla.
Luego movemos la hebilla para dejar al descubierto el remache que sujeta la pieza que tenemos que retirar y que es por donde pasa el cinturón. Procurad que queden bien sujetas tanto la hebilla como esa pieza, no vaya a salir disparada.

Con la radial y mucho cuidado vamos comiéndonos la parte visible del remache hasta que desaparece por completo y podemos ya desmontar la pieza en donde va sujeto el cinturón.

Sujetamos de nuevo sólo la hebilla y luego con cuidado pulimos lo que queda del remache y de las dos puntas (una a cada lado) que mantienen la pieza del cinturón en su sitio.
Lo más difícil ya está hecho y el reverso de la hebilla queda así.

Ahora hay que pegar la hebilla al respaldo. En un conocido centro comercial especializado en bricolage encontré una cinta adhesiva de doble cara hecha de espuma (para absorber cualquier irregularidad mejor que tenga un poco de grueso, en este caso es aprox. 0,5 mm). Esta cinta es especial para exteriores y resistente a los rayos UV. O sea, perfecta para el uso que le queremos dar.

Cortamos pedazos de cinta y vamos cubriendo el reverso de la hebilla hasta tenerla cubierta por completo.

Ahora sólo tenemos que quitar el protector de papel de la cinta y pegar la hebilla en nuestro respaldo.
Y el resultado es...........
¡¡¡ESPECTACULAR!!!Espero que os guste la idea. A mi compay Walker le gustó tanto que ya la lleva también puesta en la moto.

Saludos
FatBoy